Los Presidenciables

martes, enero 10, 2006

Andrés Manuel López Obrador - Triunfo en el Distrito Federal

El 29 de marzo de 2000, Andrés Manuel López Obrador se inscribió como candidato para la elección de Jefe de Gobierno del Distrito Federal de ese mismo año. Su registro como candidato a esta contienda fue impugnado ante el Tribunal Electoral por sus mismos compañeros de partido (principalmente Demetrio Sodi de la Tijera y Pablo Gómez); no obstante, luego de diversas presiones políticas efectuadas por su amigo y operador político René Bejarano y un nuevo acuerdo con el entonces Presidente Ernesto Zedillo, se le permitió competir como candidato de la "Alianza por la Ciudad de México", compuesta por el PRD y varios partidos minoritarios.
López Obrador ganó la elección con un 38,3% de los votos emitidos, contra 33,4% de su más cercano rival, Santiago Creel del Partido Acción Nacional.

Jefatura de Gobierno

López Obrador tomó posesión de la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal el 5 de diciembre de 2000. Al inicio de su administración adoptó una estrategia de confrontación con el Presidente Vicente Fox Quesada, convirtiéndose en su principal antagonista político.
Varios aspectos han caracterizado la administración de López Obrador. Entre ellos:
· La creación de un programa de apoyo económico para personas de la tercera edad y madres solteras.
· Impulsó la construcción de vivienda en zonas específicas del Distrito Federal (especialmente el norte y centro de la ciudad) y el desarrollo de obras viales de gran visibilidad en la zona poniente de la ciudad.
· Creó la Universidad de la Ciudad de México con 16 nuevos bachilleratos, cuyos estudios todavía carecen de Reconocimiento de Validez Oficial.
· Fomentó la construcción de hospitales en diversos barrios y le aseguró la gratuidad del servicio médico a personas de la tercera edad y madres solteras.
· Una actitud de confrontación y poco respeto por la ley cuando ésta no beneficia su agenda particular.
Los niveles de aceptación de la gestión de López Obrador fueron considerablemente altos y con una tendencia creciente durante prácticamente todo su período de gobierno. En el 2004, su popularidad se vio afectada por revelaciones de corrupción de algunos de los más cercanos funcionarios de su gobierno y de sus operadores políticos. López Obrador argumentó que ellas eran parte de un complot político en su contra.